Aunque la protagonista de esta boda se quedara sin celebración y sin los regalos de boda, fue ella y su familia decidió no cancelar el banquete e invitar a personas sin hogar.
Aquí la historia de su boda.
El pasado 15 de septiembre en un complejo hotelero de lujo de Atlanta, Estados Unidos, tuvo lugar un banquete de boda, formado por un coctel al aire libre y un almuerzo en uno de los salones con cuatro platos.
Hasta aquí la historia es normal, salvo por una cosa, no se celebraba ninguna boda.
Cuarenta días antes, la hija de Willie y Carol Fowler, comunicaba a sus padres que no iba a casarse. Cuando iban a cancelar el banquete los padres decidieron únicamente cambiar la lista de invitados por 200 personas sin hogar de la ONG ‘Hosea Feed the Hungry’, en la que había trabajado su hija de pequeña. Al principio la organización pensó que era una broma y tuvieron que ir personalmente el matrimonio Fowler a contárselo.
Esta idea parece ser que tendrá continuidad, de hecho, se quiere repetir cada año con dos días de duración en la que se incorporen talleres de educación.
Al año son muchas las bodas que se cancelan y con actos como estos pretenden el matrimonio animar a que hagan lo mismo y hacer que no se tire nada a la basura.
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